miércoles, 28 de febrero de 2018

¡HAY PAIS PAIS!


                    Critica a la discusión sobre el aborto en el dia de hoy

En el año 83, en el advenimiento de la democracia. Llegaron a nuestra realidad una cantidad de posibilidades para construir un país serio y responsable, pero por sobre todas las cosas, un país que dejaría para los países limítrofes y al mundo, que aquí habíamos aprendido la lección frente la nuestra realidad. En aquellos tiempos estábamos sensibles, muy sensibles. Y ¿sensibles a qué?... a la muerte del otro, pero lo más nefasto de este asunto no era la muerte -propiamente dicha- sino que el otro no está, desapareció, se fue. Esa ausencia, lleva a millares de personas a la completa insensibilidad y sensibilidad al mismo tiempo. Permítame hacer un juego de palabras para poder explicar o definir situaciones muy complejas de aquellos tiempos, es que es la única forma de poder explicar como de allí terminamos aquí.

Las situaciones que nos llevaron a donde estamos hoy es el doble discurso de la dictadura, su discurso tan nefasto que nos introdujo en una cueva muy difícil de transitar sabiendo y observando la salida, pero no disponer de la iniciativa para ir a la salida. Este discurso fue el del «no te metas», haciendo de nuestra sociedad gente que vio, presencio y hasta participo de desapariciones en todo barrio de nuestro país, de esta manera era necesario la participación conjunta y colectiva de la obligación de callar la voz de la conciencia teniendo este tipo de enunciados, “no te metas”, “por algo se lo llevaron”. Así, de manera sistemática, la otra dictadura, la de la conciencia que detrás de los barrotes en la celda del miedo, el miedo a decir, a denunciar, a levantarse en contra de todo este aparato tan nefasto, quedo allí encerrada sin poder decir nada. La dictadura se fue, pero quedamos allí con la celda abierta, pero con la vergüenza de lo que fuimos.

Otro del enunciado de la dictadura fue «Los argentinos somos derechos y humanos», de esto quiero solo remarcar que este slogan fue puesto en autos, ventanas, colectivos etc. En el año 1979 todo el país tenía que leer esta frase en todos lados. Pero mire detenidamente las contradicciones, “los argentinos somos derechos” esto se sacó en medio de una situación ausente de un estado de derecho, un ciudadano en medio de una dictadura no tiene derecho a nada aun hasta la vida. Por otro lado “y humanos” ¿qué humanidad puede haber cuando se flagela al otro? desmembrándolo de su existencia, de su familia, de la sociedad, de todo. Matando al otro porque piensa diferente y asediando a los demás para no seguir sus pasos. ¡Cuánta hipocresía! ¡Qué falta de integridad!

Después llego la democracia, tan esperada, tan anhelada y con un alto precio, con todos sus vaivenes, sus idas y vueltas, cada gobierno con su tendencia, uno democrático, otro liberal, otro desastroso, el siguiente centrados en sí mismo y hoy quien sabe para dónde van, lo sabremos después. Pero los últimos gobiernos democráticos han incurrido en darle al hombre ciertos discursos para “legalizar una condición” más allá del discurso. la legalización de condiciones humanas que están lejos de la condición de la existencia de todo ser es tan peligrosa que puede llevarnos nuevamente a condiciones de insensibilidad frente al otro.

Estos discursos –algunos de ellos- fueron después llevado al plano de la legalidad, pero considero que no fue una situación social gestada por medio de la convivencia, la con urbanidad y sus situaciones, aquí se legalizo una condición humana. Esta fue la del matrimonio igualitario, esto trajo confusión y alteración de valores que introdujo a la sociedad en mas indiferencia, cuando en un estado sus bases institucionales como la familia toda se cae aun llevado al plano de lo relativo. Sobre este tema ya está todo dicho y no hay más discusión hemos caído un valle promiscuo.

Pero ahora estamos en otra debacle, es la solicitud del aborto, para ser mas preciso hoy la multitud, una inmensa minoría, pide la despenalización, la legalización del aborto libre y gratuito. Veamos un poco esto cuando hablamos de despenalización estamos diciendo que debemos quietar una ley que penaliza el aborto, es decir esto está prohibido por ley, entonces para imponer una ley hay que modificar otra porque está por sobre el derecho la condición humana. Hans Kelsen1 en su ensayo Teoría del Derecho expone al derecho con aquello que está por sobre la condición humana, que lo rige, lo conduce y lo restringe si quebranta el derecho. Nunca el derecho se pone por debajo de la condición humana, sino que este es un principio superior al hombre. Hoy se está tratando nuevamente de poner al derecho por debajo del hombre.

Por otro lado, el termino legalización expone al estado como único responsable de articular todo un sistema para que el aborto sea seguro para quienes quieren abortar, entonces es el estado que se coloca como articulador de un sistema de exterminio legal, de esta situación ya sabemos bastante.
El aborto debe ser libre, cualquiera sea la condición y motivación del o de la individuo puede hacerlo. Y gratuito, el estado lleva toda la responsabilidad económica en este asunto.

Estos gobiernos son despersonalizados, esto está más allá de todo ideal político, es la evidencia de una condición humana, la del hombre fuera del Edén, ya que este lo primero que hiso ni bien tuvo conflictos con el otro, lo mato. El juicio de Dios sobre los hombres fue tajante y contundente, por la sangre de Abel Dios juzgo la sociedad. hebreos 11:4 así que frente a toda esta situación que hemos de hacer.
Quisiera dejar algunos enunciados para poder tener en claro algunos asuntos que nos llevaran a pensar y a la hora de debatir hemos de rechazar esto con argumentos coherente y sensatos. Veamos

Creemos que…


El feto es creación de Dios, propiedad de Dios y proyecto de Dios, nadie sino solamente el Señor del universo puede disponer de él. Nadie, ni la mujer que le lleva en su seno, puede pretender tal privilegio. La vida del nonato es dominio sacrosanto vedado a la intervención divina de manos humanas por consideraciones utilitarias.

Creemos que al feto hay que respetarlo como humano en potencia que es y, por consiguiente, como nuestro prójimo.

Creemos también, que el nonato es digno de las mismas consideraciones y derechos que se le reconocen a la persona humana en posteriores estadios del desarrollo.

Creemos que la única forma responsable de concebir la maternidad es aquella que comienza por el reconocimiento de la nueva vida y del compromiso afectivo y humano consecuente.

En esta perspectiva Bíblica, el aborto constituye un intento deliberado de torcer los planes de Dios de no reconocer los derechos de propiedad que el creador tiene sobre sus criaturas.

El aborto niega el derecho del feto a la vida y también niega la soberanía de Dios sobre la existencia. Es un desacato a la autoridad de la palabra revelada y, por consiguiente, a la autoridad misma de Dios.

Dado que el feto es humano y es mi prójimo... Abortar significa...

1. Un infanticidio.
2. Una negación de la humanidad del embrión.
3. Una negación de los derechos humanos.
4. Una pretensión de ocupar el lugar de Dios.

Ahora hoy se está discutiendo una nueva tendencia en la retórica de discusión, primero se descalifica todo enunciado religioso y filosófico, porque saben que allí su discusión está perdida. La representante de la LBGT2 Maria Rachid ha traído a la discusión en diferentes medios de comunicación un discurso tan hueco y carente de sentido, evitando toda confrontación el debate, no respondiendo a las preguntas sobre ética y moral, pero lo más nefasto de esta proselitista es el hecho que ella se cree tener respuestas más precisas que un médico y un genetista. Ella discute, alza la voz, no deja hablar impone su discurso haciéndose ella, un elemento ridículo de la retórica. LGBT es la sigla compuesta por las iniciales de las palabras Lesbianas, Gais,1 Bisexuales y Trans. En sentido estricto agrupa a las personas con las orientaciones sexuales e identidades de género relativas a esas cuatro palabras, así como las comunidades formadas por ellas. La expresión tuvo su origen en el idioma inglés en los años noventa, pero estas iniciales coinciden en varios idiomas, entre ellos el español.

En conclusión, que trae la discusión del aborto a nuestra realidad, esta discusión pone evidencia de las condiciones que nos rodean, es una lucha de conceptos y de líneas de pensamiento en la cual debemos presentar una batalla sin tregua. En estos días me dijeron algo que me dejo pasmado, los creyentes no podemos abordar esta discusión con la biblia. Me pregunto ¿qué argumento hemos de usar entonces? Las escrituras contienen no solamente principios y verdades absolutas sino principios éticos antropológicos que ponen en evidencia la condición del hombre sino también que estos sirven para que a sociedad pueda tomar una dirección correcta. Nuestra discusión es por la biblia, desde la biblia y hacia la biblia y fuera de esta es solo un discurso hueco y carente de sentido aferrado a dogmatismo teológicos.

Lo que encontramos aquí es lo siguiente:

- La vida es un principio absoluto, y esta parte de Dios: el hombre debe por sobre todos derechos que este pueda tener, tiene la obligación de preservar la vida. Juan 1:3-4.

- El ser y su construcción es la evidencia de la creación de Dios, este -el ser- tiene todas las facultades preparadas para desarrollarse dentro del ambiente y la condición fetal, es decir el feto es un ser, independientemente si este tenga o no experiencia. Es un ser preparado para vivir. Salmos 139:15.

Es así entonces que hemos de tomar estas verdades y defenderlas porque son la verdad de las escrituras. no debemos incurrir en relativismos y dogmatismos teológicos la discusión es mucha más seria. A diferencia de la discusión que se dio con el matrimonio igualitario es lo siguiente, tal discusión y aprobación no determino la muerte de nadie. Aquí hay implícito en la discusión la muerte de personas que no nacieron, y es allí el plano de la discusión. Esto se discute en una esfera de vida o muerte, así que toda discusión superficial y relativa no solo determinará la vida y la muerte de otra persona, sino que pondrá en evidencia de nuestra pobreza teológica, nuestra superficialidad intelectual, nuestra falta de amor por la vida sino también nuestra indiferencia hacia el otro y de esta manera no hacemos otra cosa que, entre creyentes e incrédulos los dos grupos hemos de repetir la historia.
                                                                   Mario Griguelo
                                                                 Maestro de Teología
                                                                       28/22/2018

No le es permitido al hombre, ni se le ha entregado el derecho de decidir quién sale de la esfera de los vivos (matando). Por otro lado, no tiene el derecho ni la facultad, de decidir quién entra en la esfera de lo vivos impidiendo el nacimiento.

He aquí que todas las almas son mías; como el alma del padre, así el alma del hijo es mía¨
                                                                                                                                                 Ezequiel 18:4